RAMAS DE LA ESPERANZA (Poemas ecológicos)
que me brinda oropéndolas y alerces,
el pródigo esplendor de arroyos y de cumbres,
caminos con retamas y sorpresas,
y me permite izar el arco iris.
Cristina Lacasa
Desde sus primeros versos Cristina Lacasa se revela como poeta bien consciente de la Naturaleza, no siendo esta mero escenario intelectualizado donde situar sus disquisiciones estéticas, sino una realidad palpable y espiritual. La naturaleza en RAMAS DE LA ESPERANZA (poemas ecológicos, 1984) lucha por sobrevivir. Muchos poemas del libro consideran la contaminación del medio ambiente, por ejemplo, "Asesinando al mar", "El rayo radiactivo", "Atmósfera profanada", mientras otros tratan de la flora y de la fauna amenazadas por el hombre. En otros poemas, "Los zapatos", "El lecho de nogal", "El abrigo de pieles", coleccionados bajo el título "Las cosas que vivieron", se considera la dependencia del hombre en la naturaleza y a la vez lamenta la violación de la misma:
El abrigo de pieles
Abrazo de tersura, ondulación de brillos,
suntuoso despojo que siendo muerte es halo
sobre impávidos hombros de damas prepotentes.
Llama sin fuego, fleco boreal,
inocencia que paga su belleza
con la heredad suprema de la vida.
Cristina Lacasa
Catedrática de la "University of Oregon"
Eugene, Estados Unidos.